AMF muestra sus etiquetas para vinos creados por pueblos originarios
19/08/2022La Cooperativa Campesina de LickanAntay produce estos vinos en medio del desierto más árido del mundo, entre 2.400 a 3.200 metros sobre el nivel del mar. “Una de las principales características es que ocupamos material reciclado”, cuenta Rose Marie Vera, gerente comercial de AMF Etiquetas.
Un vino único, producido manualmente por atacameños en el desierto más árido del mundo en el norte de Chile entre 2.400 y 3.200 metros sobre el mar, cuenta con etiquetas con características igual de especiales, desarrolladas por AMF Etiquetas.
Estos vinos son hechos por la Cooperativa Campesina de LickanAntay, que nació hace cinco años en la comuna de San Pedro de Atacama y que realiza el vino marca Ayllu, conservando la tradición de una agricultura milenaria por lo que tienen colores, aromas y sabores únicos.
La bodega donde se elaboran estos vinos se encuentra en Toconao, al igual que la mayor parte de los viñedos. Además, cuentan con plantaciones repartidas en una franja de 80 km desde Quitor hasta Socaire. Las líneas de vinos que producen son Ayllu Mezcla Tinto, Mezcla Blanco, Naranjo, Rosé, Criollo Dulce, Haalar Premium y Haalar Ícono.
Vinos únicos
Wilfredo Cruz, gerente general de la Cooperativa LickanAntay, dice que existen características especiales que tienen las etiquetas para estos vinos, cuyo diseño se inspiró en las geodas, que son similares al desierto, y en las haalar, o estrellas, por los cielos más limpios: “Las condiciones que tenemos en el desierto son completamente diferentes al resto del planeta. Esto, porque en promedio la humedad relativa del aire es 18%, es decir, sequedad que desprende las etiquetas. AMF nos da la seguridad de mantener nuestra presentación por lo menos en vinos tintos”.
Cuenta que la alianza surgió en 2020, pero que ambas empresas habían tenido un acercamiento antes por un packaging. “Sabemos los difícil que es lograr buenos proveedores, más si estamos en el extremo norte del país. Podemos decir que sentimos atención preferencial, considerando que somos una pequeña bodega. Por lo tanto, siempre hemos tenido comunicación directa, apoyo en detalles de diseño y flexibilidad en el pedido de etiquetas”, afirma.
Etiquetas de alta calidad y con material reciclado
Rose Marie Vera, gerente comercial de AMF Etiquetas, explica: “Al saber que andaban buscando una forma de realizar sus etiquetas, que eran de un volumen bastante bajo por lo que les generaba una dificultad, nos llamó la atención su proyecto, de dónde venían, y que eran una cooperativa indígena. Decidimos aceptar el desafío y poder ayudar a salir con sus productos. Les dimos asesoría comercial, de logística de traslado, y todo resultó bastante bien”.