Herramientas para aumentar la productividad en la Industria Gráfica

Mientras avanza la transformación digital en la mayoría de las industrias del mundo, el sector gráfico chileno también está trabajando por impulsar su productividad. Y es que, en momentos de debilidad económica, lograr ser más eficientes e invertir en herramientas clave puede marcar la diferencia.

“La tecnología ayuda en diferentes aspectos, lo más básico es la gestión general de una empresa y eso es un proceso que ya está relativamente incorporado en la mayoría de las compañías del país”, explica Francisco Mardones, presidente del Programa Transforma Industrias Inteligentes de Corfo, quien destaca que actualmente se vive una época de transformación de los modelos de negocios, a partir de la modificación de los procesos y servicios”, agrega.

La automatización, por ejemplo, es una de las herramientas diseñadas para empujar la productividad de las empresas, incluyendo al sector gráfico. De acuerdo a un estudio de la Asociación de la Industria Eléctrica-Electrónica, las empresas que han automatizado sus procesos, haciendo uso de la implementación adecuada y con la asesoría correcta, han llegado a aumentar su producción en hasta un 30%.

La aplicación de Lean Manufacturing en microempresas logró aumentar en 66% la producción e incrementar en 26% la productividad total, según estudio.

Según Mardones, la automatización actualmente sustituye tareas que antes eran desarrolladas por humano. El desafío es “que las personas que antes trabajaban haciendo una tarea rutinaria tengan que moverse a otras tareas que tengan una mayor carga cognitiva, lo cual entrega un gran valor porque es muy difícil copiar la creatividad, entonces es ahí donde también están los desafíos”.

Mejores procesos

No solamente la tecnología puede ayudar en el camino a la productividad. También hay mejoras en los procesos productivos que apuntan en este sentido. Uno de ellos es Lean Manufacturing, o “producción ajustada”, que busca entregar el máximo valor utilizando para ello los mínimos recursos necesarios.

Esta metodología apunta a reducir, por ejemplo, los desperdicios generados en sobreproducción, inventario, procedimientos excesivos, entre otros. Se trata de la búsqueda de una mejora continua que elimina las actividades que no agregan valor, a través de diferentes herramientas.
Según un estudio de la Universidad Privada del Norte, en Perú, la aplicación de Lean Manufacturing en microempresas logró aumentar en 66% la producción e incrementar en 26% la productividad total, entre otros impactos positivos.

Casos destacados

Chile: Empresas Jordan

Es una empresa destacada en el segmento de la impresión que estratégicamente ha evolucionado hacia el mundo virtual, convirtiéndose así en la primera imprenta en innovar con este tipo de tecnologías. Inició el proceso de Mejora Continua en el 2008, con la adopción de Lean Manufacturing para empoderar a operadores y ayudantes. Luego incorporó TPM como una filosofía cuyo foco es eliminar las pérdidas asociadas a las detenciones de las máquinas, los problemas de calidad (merma) y las pérdidas de velocidad en los procesos productivos. En estos nueve años se han obtenido ahorros significativos en los costos fijos y variables, a los cuales se hace seguimiento de forma mensual con los estados de resultados de la empresa.

España: Romeu

Fundada en 1940 y enfocada en la comunicación gráfica y editorial, apostó por incorporar en 2011 un CRM para gestionar la relación con sus clientes y optimizar el trabajo de su fuerza comercial. Con esto, la empresa consiguió agilizar los trámites administrativos para la preparación de informes, el análisis de la actividad de los comerciales, la planificación de sus acciones y el seguimiento de los clientes y las operaciones de venta.

Bolivia: Sagitario

Es una de las empresas de artes gráficas más grandes de ese país. En 2013 inauguró unas modernas instalaciones y renovó casi la totalidad de sus equipos de impresión por maquinaria automatizada. Cuenta con equipos digitalizados que ejecutan todo el proceso de impresión en línea, con mínima participación humana, y que trabajan a altas velocidades, disminuyendo los tiempos de producción y ofreciendo productos de alta calidad.

Por: Claudia Marín / ASIMPRES