Qué fue de… Rodrigo Peña, prensista offset en Impresos G4

31/05/2018

“La perseverancia y la paciencia es lo que más se aprendía en la Escuela. Y es algo muy útil de saber hasta el día de hoy”.

El interés de Rodrigo Peña por la industria gráfica surge a partir de un hermano mayor que era prensista offset, a través de quien supo que existía la Escuela de Artes Gráfica. Fue así como estudió y egresó el año 90 de Impresión Gráfica.

Su práctica la hizo en Diprint, donde trabajó por 16 años y llegó a ser jefe de prensa offset. Posteriormente, se desempeñó en B&B impresores y después tuvo la oportunidad de trabajar como jefe de taller en la Editorial Edobol, en La Paz, Bolivia.

Por asuntos de fuerza mayor tuvo que volver a Chile, donde se integró a Impresos G4. “Tuve la suerte de comunicarme con don Gerardo Soto, gerente general, quien se estaba instalando con su imprenta. Yo sabía imprimir, doblar y cortar, lo que era necesario para las tres máquinas que tenía en ese entonces: la Heidelberg Speedmaster SM 52, la Polar 115 y la Stahl 54. Ahí empecé a trabajar solo en el taller”, explica Rodrigo. De esto ya han pasado 9 años.

De la industria gráfica, explica que disfruta “el día a día. Un día nunca es igual que otro. No es rutinario…acá hay que hacer de todo, desde cortar el papel, imprimirlo, terminarlo y hasta despacharlo”, agrega sobre su labor en Impresos G4, donde también se encarga de las reparaciones de la máquina Heidelberg SM 52.

Sobre su paso por la Escuela, Rodrigo destaca: “La perseverancia y la paciencia es lo que más se aprendía en la Escuela. Y es algo muy útil de saber hasta el día de hoy”.